La relación y los favores que tiene la música en la vida y el desarrollo de las personas es una realidad. Al profundizar de forma más específica sobre la experiencia musical en concreto, nos encontramos con un amplio abanico de destrezas que podemos desarrollar a partir de habilidades que usen nuestro cuerpo y nuestra voz como hilos conductores.
Proponemos una sesión grupal para infancia con diversidad funcional acompañada de sus progenitores (1 o ambos) en las que experimentaremos con nuestro cuerpo y nuestra voz como hilos conductores para soltar, expresar, sentir e integrar formas de autocuidado y disfrute en nuestra vida diaria. Esta propuesta pretende proponer un espacio de crecimiento e interacción familiar, usando la experiencia musical como conector.