Las fases alimentarias por las que puede pasar una persona que padece algún tipo de enfermedad crónica, por ejemplo la diabetes, son cinco:
1. Fase de Negación o Rechazo.
2. Fase de Rabia, Ira o Resentimiento.
3. Fase de Negociación y Búsqueda de Apoyo Emocional.
4. Fase de Depresión.
5. Fase de Aceptación o Dependencia.
Este proyecto surge de la necesidad de información, orientación y formación acerca de la enfermedad que tienen las personas que acuden a la sede de la asociación, se realiza con la finalidad de formar un grupo de personas que padecen la misma enfermedad, para proporcionar y compartir experiencias y vivencias personales que pueden orientar y complementar conocimientos de la alimentación en la diabetes.
El diagnóstico de la diabetes supone una gran conmoción y crisis tanto para la persona diagnosticada como para sus familiares. Desde el punto de vista de la alimentación, la diabetes surge en el seno de la familia y no en una persona aislada. La diabetes irrumpe en la vida familiar y esta se ve obligada a reorganizarse para adaptarse a esta nueva situación. Una ineficaz estrategia de adaptación compromete el adecuado desarrollo psicosocial, por lo que la alimentación tiene un papel relevante en el entorno familiar y social.
Está plenamente demostrado que la mejor forma de adaptación y adecuado control de la diabetes es la formación en todos los aspectos relativos al manejo diario de la enfermedad. A diferencia de otras enfermedades crónicas, en el caso de la diabetes, el paciente es el responsable directo de la mayor parte de las medidas que influyen en su enfermedad. La alimentación, junto con el ejercicio, es imprescindible en el día a día de los pacientes con esta patología.