En Aragón se diagnostican anualmente una media de 115 casos nuevos de VIH. Desde 2008 se han diagnosticado más de 1.400 personas con VIH en la comunidad que, contando los anteriores al 2008, incrementa el número de afectados a más de 5.000, un número importante para emprender proyectos que atiendan a estos pacientes.
Las personas con VIH han sido uno de los grupos más estigmatizados socialmente, siendo un colectivo muy vulnerable. La falta de información, de recursos especializados o el rechazo asociado al VIH, hace necesario desarrollar programas que pongan en el centro de su atención a la persona seropositiva.
La educación entre pacientes afectados por una misma enfermedad presenta ventajas frente a otros modelos de atención y promoción de la salud, como una mayor credibilidad para el paciente al ser otro paciente el que relata su experiencia, además de compartir características personales, circunstancias y experiencias clave que contribuyen a la mejora de la calidad de vida de los pacientes con enfermedades crónicas.
Con nuestra propuesta buscamos capacitar a los pacientes afectados por VIH/sida, para dotarles de autonomía en la gestión de su enfermedad y que puedan vivir una vida plena y empoderarse socialmente.
El objetivo de estos talleres es mejorar la calidad de vida de los pacientes con VIH como pacientes crónicos, favoreciendo su formación activa, creando un espacio para el acceso a la información y formación entre iguales en materia de salud y VIH. Un lugar para que los pacientes aprendan y enseñen las mejores formas de cuidarse y de cuidar. Se trata de favorecer la participación y el intercambio de experiencias y conocimientos de pacientes, familiares, y también de profesionales sociosanitarios.
Planteamos responder a tres desafíos de vivir con VIH en el 2023 como paciente activo con VIH, a través de la realización de 3 talleres vivenciales:
- El primer taller es "Convivir con VIH implicaciones en el día a día": se trabajará el afrontamiento y manejo de la enfermedad en el entorno social, emocional y afectivo.
- El segundo taller va enfocado a la Promoción de la salud, teniendo en cuenta cómo influye el estilo de vida, así como las condiciones de vida en los pacientes VIH.
- En el tercer taller se fomenta la Resiliencia y cómo puede contribuir un paciente activo con VIH en el cuidado y apoyo a otras personas afectadas.