El objetivo principal de este programa es impulsar el desarrollo integral de los jóvenes con autismo.
Trabajar las habilidades sociales implica intervenir en diversas áreas del desarrollo. Por ello, el programa se centra en la mejora de la comunicación, el desarrollo social y emocional, la conducta, la autonomía y las funciones ejecutivas.
Como personas de pleno derecho, los participantes proponen las actividades que quieren realizar a lo largo del curso y desde ANA nos ponemos manos a la obra para adaptarlas y acompañarles en todo el proceso (si es necesario).
Los chicos y chicas adquieren habilidades de comunicación y competencias sociales, ofreciéndoles las herramientas necesarias para realizar una buena inclusión en diversos contextos sociales. Además, el proyecto se centra en fomentar la capacidad de aprovechar y disfrutar al máximo su tiempo libre.
El programa se desarrolla en dos partes: diferentes salidas durante dos sábados al mes y campamentos semanales al final del curso.