Está comprobado que el tratamiento para una persona afectada de enfermedad reumática no puede ser solo farmacológico. También resulta imprescindible contar con otros tratamientos complementarios como la atención psicológica, las actividades de rehabilitación y el deporte adaptado, entre otros.
Este programa busca ofrecer un espacio de rehabilitación que complemente las actuaciones propias del sistema sanitario.
Los ejercicios acuáticos se integran en la medicina de rehabilitación y son muy beneficiosos por:
- aliviar el dolor articular,
- mejorar la capacidad de movimiento de las articulaciones afectadas,
- ejercitar y fortalecer la musculatura.
Para desarrollar estos ejercicios no hace falta una preparación física previa ni específica, y tienen un riesgo de lesión bajo.
Además de los beneficios físicos, también ayuda contra la depresión, a mantener la salud desde una perspectiva integral y a mejorar la calidad de vida al crear una sensación de bienestar.