El Lipedema es una enfermedad crónica, así que no existe ninguna cura definitiva. Cada persona puede seguir diferentes tratamientos según sus circunstancias personales y su grado de afectación.
La progresión del Lipedema es variable, ni aparece en el mismo momento, ni todas las afectadas evolucionan de la misma forma ni al mismo estadio, y tampoco se responde siempre igual al mismo tratamiento. Sea cual sea el elegido, lo ideal es que éste sea multidisciplinar, compuesto entre otros por fisioterapia, nutrición y apoyo psicológico.
Los objetivos principales de estos tratamientos deben ser:
· Minimizar el dolor.
· Detener o revertir la evolución.
· Prevenir el linfedema secundario.
· Mantener y/o mejorar la movilidad.
En general, ayudan a ralentizar el crecimiento de las células grasas, mejoran el sistema linfático, ayudan a reducir la sensación de pesadez de piernas y el dolor, y a controlar el avance al siguiente estadio del Lipedema.
Pero estas opciones no están contempladas en el sistema sanitario público, por lo que las pacientes de Lipedema deben costearlas de forma privada. Esta situación no siempre es posible de afrontar por parte de las afectadas, ya que los costes son muy elevados y es necesario prolongarlos durante mucho tiempo.
Por medio de este proyecto queremos ayudar a financiar los tratamientos a aquellas afectadas con dificultades económicas, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de enfermas de Lipedema a nivel físico, psicológico o emocional.
Estos tratamientos comprenden:
· Fisioterapia: drenaje linfático manual (DLM), terapia mecánica, radiofrecuencia, vendajes y prendas compresivas, ejercicios.
· Nutrición: análisis de patologías digestivas asociadas al lipedema, alimentación antiinflamatoria y educación nutricional.
· Psicológico: análisis de la situación de la paciente, apoyo emocional y terapias.